La cooperación con los padres es parte esencial de nuestro trabajo pedagógico y el centro de atención lo ocupa el niño siempre. En la planificación de esta cooperación, nosotros tenemos en cuenta las condiciones de vida heterogéneas de las familias. Una cooperación que sea sincera y apreciada por los padres y educadores ofrece a todos los afectados orientación y seguridad, de forma que el niño disfruta de una condiciones ideales para su desarrollo.
Como centro pedagógico, para Le Jardin es importante un trato con los padres de igual a igual. Los padres son los expertos en lo referente a su hijo y son quienes mejor lo conocen. Por medio de la escucha activa y un trato sincero se crean las bases para un diálogo lleno de confianza. Esto es fundamental para constituir una base pedagógica conjunta para bien del niño.
Cuando nos referimos a una colaboración en la educación, estamos pensando tanto en formación como en educación. Nosotros colocamos en un primer plano la posibilidad de conciliar la vida familiar y laboral conseguida a través del cuidado profesional de los niños. En esta cooperación se tiene en cuenta el concepto educativo previsto y las expectativas de todos los afectados. De esta forma es posible determinar y desarrollar de manera conjunta los objetivos de la educación y formación. A través de esta colaboración en educación, el niño no solo recibe seguridad estructural e informativa, sino también un apoyo emocional y una continuidad entre el centro y su hogar.
Le Jardin se considera a sí mismo un centro que complementa y apoya a la familia. Esto significa para nosotros que los padres tienen posibilidad de recibir de nosotros ayuda y consejo en caso de dudas y problemas en asuntos relacionados con la educación, socialización y desarrollo infantil. La oferta de estos recursos profesionales es el resultado de un intenso intercambio y de un diálogo continuo.
